12 dic 2010

UNA CAMINATA POR EL MAR

Esto fue algo que escribí hace algunos meses, en una de tantas caminatas...

Santa Teresita, 24 de Octubre de 2010:

"Que extraña imagen la de nuestra América profunda. Mientras miro el mar a lo lejos y el olor de la sal penetra hasta lo más íntimo de mi ser, no puedo evitar transportarme. Estoy acá y a la vez estoy en toda la historia. Veo los barcos europeos que llegan y la conquista que comienza, pero… ahora ya no hay barcos ya, y la conquista fue perpetrada y hoy somos esclavos del mundo.

La duda cala hondo, como el aroma de la sal ¿Por qué Dios quiere que vea esto? ¿Por qué mis ojos no pueden detenerse tan solo en el instante presente?

Es que Dios escucha el dolor de su pueblo, siente la herida de su creación, ve la sangre que se derrama de las venas abiertas de este continente y del mundo.

Y quien busca a Dios, se encuentra con esta zarza que arde, y mierda que arde… o será al revés… quien logra ver la zarza que arde, quien logra ver y sentir el dolor de este nuestro pueblo, comienza a descubrir a Dios y su sufrimiento al ver a sus hijos desgarrados.

El mar agudiza el misterio. Da cuenta de la pequeñez del hombre que se ha creído su propio Dios. Me extraña que hombres de mar, como los que vinieron antaño, hayan llegado a creerse la sima del universo, cuando uno no puede más que yacer frágil, indefenso, impotente ante el majestuoso océano azul. Y la relación del hombre con el agua se cristaliza aquí. Parece tan cercana. Como si fuera tan solo ayer que nuestros remotos antepasados habitaron sus profundidades.”


Joche

1 comentario:

  1. "quien logra ver la zarza que arde, quien logra ver y sentir el dolor de este nuestro pueblo, comienza a descubrir a Dios y su sufrimiento al ver a sus hijos desgarrados"
    Me encanto Jose , no sabia que te gustaba escribir y que lo hacias tan bien. Esta buenisimo que compartas esto a todos!
    Clara

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